Espero - Mario Benedetti

Te espero cuando la noche se haga día,
suspiros de esperanzas ya perdidas.
No creo que vengas, lo sé,
sé que no vendrás.
Sé que la distancia te hiere,
sé que las noches son más frías,
Sé que ya no estás.
Creo saber todo de ti.
Sé que el día de pronto se te hace noche:
sé que sueñas con mi amor, pero no lo dices,
sé que soy un idiota al esperarte,
Pues sé que no vendrás.
Te espero cuando miremos al cielo de noche:
tu allá, yo aquí, añorando aquellos días
en los que un beso marcó la despedida,
Quizás por el resto de nuestras vidas.
Es triste hablar así.
Cuando el día se me hace de noche,
Y la Luna oculta ese sol tan radiante.
Me siento sólo, lo sé,
nunca supe de nada tanto en mi vida,
solo sé que me encuentro muy sólo,
y que no estoy allí.
Mis disculpas por sentir así,
nunca mi intención ha sido ofenderte.
Nunca soñé con quererte,
ni con sentirme así.
Mi aire se acaba como agua en el desierto.
Mi vida se acorta pues no te llevo dentro.
Mi esperanza de vivir eres tu,
y no estoy allí.
¿Por qué no estoy allí?, te preguntarás,
¿Por qué no he tomado ese bus que me llevaría a ti?
Porque el mundo que llevo aquí no me permite estar allí.
Porque todas las noches me torturo pensando en ti.
¿Por qué no solo me olvido de ti?
¿Por qué no vivo solo así?
¿Por qué no solo...


Mario Benedetti

Autonecrología V

"Te quiero porque tienes las partes de la mujer
en el lugar preciso y estás completa.

No te falta ni un pétalo, ni un olor, ni una sombra. 
Colocada en tu alma, dispuesta a ser rocío en la yerba del mundo,
leche de luna en las oscuras hojas. 
Quizás me ves, tal vez, acaso un día, en una lámpara apagada,
en un rincón del cuarto donde duermes,
soy la mancha, un punto en la pared,
alguna raya que tus ojos, sin ti, se quedan viendo.
Quizás me reconoces como una hora antigua cuando a solas preguntas,
te interrogas con el cuerpo cerrado y sin respuesta.
Soy una cicatriz que ya no existe, 
un beso ya lavado por el tiempo,
un amor y otro amor que ya enterraste.
Pero estás en mis manos y me tienes y en tus manos estoy,
brasa, ceniza, para secar tus lágrimas que lloro.
¿En qué lugar, en dónde, a qué deshoras me dirás que te amo?
Esto es urgente porque la eternidad se nos acaba.
Recoge mi cabeza. Guarda el brazo con que amé tu cintura.
No me dejes en medio de tu sangre en esa toalla"

Haz como el sol

No te aferres al pasado
ni a los recuerdos tristes.
No abras la herida que ya cicatrizó.
No revivas los dolores y sufrimientos antiguos.
Lo que pasó, pasó....
De ahora en adelante,
pon tus fuerzas en construir una vida nueva,
orientada hacia lo alto, y camina de frente,
sin mirar atrás.
Haz como el sol que nace cada día,
sin pensar en la noche que pasó.
Vamos, levántate...
porque la luz del sol está afuera!

Jaime Sabines


Ritmo 0, 1974. Marina Abramovic

Instrucciones:
Los 72 objetos que están sobre la mesa pueden ser usados en mí como se desee.

Performance:
Yo soy el objeto. Durante este tiempo toda la responsabilidad es mía.
1974
Performance, 6 horas (8 p.m-2 a.m)
Estudio Morra, Nápoles

Este performance es el último del ciclo de ritmos (Ritmo 10, Ritmo 5, Ritmo 2, Ritmo 4, Ritmo 0).

Lista de objetos sobre la mesa: pistola / bala / pintura azul / peine / campana / látigo / lápiz labial / cuchillo de bolso / tenedor / perfume / cuchara / algodón / flores / cerillos / rosa / vela / agua / bufanda / espejo / vaso / cámara polaroid / pluma (de ave) / cadenas / clavos / aguja / broche de seguridad / broche para el cabello / vendaje / pintura roja / pintura blanca / tijeras / pluma / libro / sombrero / pañuelo / hoja de papel / cuchillo de cocina / martillo /sierra / pedazo de madera / hacha / bastón / hueso de cordero / periódico / pan / vino / miel / sal / azúcar / jabón / pastel / pipa de metal / escalpelo / lanza de metal / caja de navajas de afeitar / plato / flauta / banda adhesiva / alcohol / medalla / abrigo / zapatos / silla / cuerdas de cuero / hilo / alambre / azufre /uvas / aceite de oliva / ramita de romero / manzana

El trabajo de Abramović explora la relación entre el artista y la audiencia, los límites del cuerpo, y las posibilidades de la mente.

Para probar los límites de la relación entre el artista y el público, Abramović desarrolló una de sus performances mas exigentes (y la más conocida). En ella adoptaba un rol pasivo, mientras el público la forzaba a realizar la actuación.

Colocó sobre una mesa 72 objetos que la gente le permitiera usar en la forma que ellos eligieran. Algunos de estos objetos podían usarse de manera placentera, mientras que otros podían infligir dolor o incluso dañarla. Entre ellos había tijeras, un cuchillo, un látigo, una pistola y una bala. Durante seis horas la artista permitió a los miembros de la audiencia manipular su cuerpo y sus acciones.

Los espectadores tenian la instrucción de usar los objetos del modo que ellos quisieran. Al principio, los espectadores fueron pacíficos y tímidos, pero gradualmente comenzaron a ser mas violentos. 



En sus palabras:
"La experiencia que aprendí fue que... si se deja la decision al publico, te pueden matar... Me sentí realmente violada: me cortaron la ropa, me clavaron espinas de rosas en el estomago, una persona me apunto con el arma en la cabeza y otra se la quito. Se creó una atmósfera agresiva. Despues de exactamente 6 horas, como estaba planeado, me puse de pie y empecé a caminar hacia el público. Todo el mundo salió corriendo, escapando de una confrontación real"

"Guárdatelas para ti que yo no quiero"

El otro día entré en una tienda y había bastante gente, mientras esperaba mi turno vi delante de mí a una mamá con un chiquitín de unos dos años, el nene tenía una bolsa de patatas y andaba muy entretenido con ellas, miraba su bolsa, cogía una patata, la llevaba a la boca como si fuera ..... cómo explicarlo...como si fuera el mejor manjar, cada vez que cogía una patata perdía parte por el camino, dejaba migas en la mano, en la chaqueta, alrededor de su boca ... hasta conseguir comerse lo que llegaba dentro de su mano, la cual metía entera dentro de su boca para no perder bocado... Mientras hacía esto no descuidaba seguir con atención lo que se movía a su alrededor, si una señora hablaba miraba hacia ella, si alguien entraba visualizaba la puerta, si alguien se movía para ver algún precio también lo seguía con la mirada, inquieto y curioso el chiquito.

En una de las veces que una señora pasó por su lado, ella muy cariñosamente se dirigió a él, le dijo que tenía unos ojos bonitos y le sonrío, el niño le devolvió la sonrisa.
Después la señora le dijo, "¿qué comes? ¿patatas?" Él miró su bolsa como asintiendo y la señora le dijo..."¿me das una?"
El niño fijó la vista en su bolsa, llevó su manita hasta ella y sacó todas las patatas que le cabían en la mano ofreciéndoselas a la señora, entonces la señora, como tantas veces se les hace a los niños, se sonrió de nuevo y le dijo, "Ay mi niño, qué rico, que me da patatas...no cariño, guardalas para ti que yo no quiero" y ahí fue donde vi en el pequeño una cara de confusión terrible, miró a la señora, miró su manita cargada de patatas, miró la bolsa y puso cara de...."Y si no quiere ¿¿para qué me pide??"
Se vio realmente desconcertado, sin saber si devolver las patatas a la bolsa, si comérselas o tirarlas, en esa confusión, abrió la mano alargándola hacia la señora como mostrándole que eran patatas, que eran para ella, que las había pedido ella, pero ella con su ir y venir y su "qué niño más guapo" tenía suficiente...

Finalmente el pequeño devolvió las patatas a su bolsa la mano, o las migas que de ellas quedaban, y siguió a lo suyo, aunque de vez en cuando, cada vez que veía u oía a la señora que le había turbado, se quedaba mirándole como si aún necesitara comprender lo ocurrido...

A parte de que no sé si estas prácticas benefician a estos pequeños en construcción, pues considero que pueden confundirles al tratarles como si fueran 'bobos', me resultó curioso ver la reacción, la confusión y el estado de desánimo tras comprobar que su gesto no había tenido repercusión alguna a pesar d haber hecho lo correcto.
En realidad es así como nos sentimos en muchas ocasiones, especialmente en el trabajo, cuando los que mandan deciden en cada momenot qué es lo importante y lo prioritario, haciendo que dejes todo lo que estabas haciendo para dedicarte a otra cosa, cambiando tu orden para que te dediques a ellos y desmoronando todo lo que habías avanzado ya y siempre sin tener la certeza de si cuando lo termines servirá de algo o si una vez dedicado todo tu esfuerzo, tu tesón, tu generosidad y tu buen hacer para sacarlo adelante, alguien vendrá y dirá..."No cariño, guárdalo para ti que yo no quiero"... Creo que son muchas las veces que me he sentido como ese niño, que me he dado cuenta de que se pide esto y lo otro y sin embargo quien lo pide parece que no sabe ni lo que quiere...

En fin, intentaré hacer como este pequeño experto en tratar con ineptos, es decir, con adultos, devolveré las patatas que pueda a la bolsa o lo que quede de ellas, y seguiré a lo mío aunque no perderé de vista a aquellos que me hacen perder el tiempo. Creo que al menos yo ya pasé esa fase de querer comprender lo ocurrido, la mayoría de las veces no es comprensible...

Ana

Dos líneas llenas de cariño

Día a día estamos rodeados de gente, nos comunicamos, nos decimos cosas buenas y malas, nos sentimos a veces bien, a veces mal, pero son muchas las veces que aun no pasando nada, aun sintiéndonos bien, en realidad estamos carentes de algo, son muchas las veces que aun estando rodeados de gente, podemos sentirnos solos, y muchas también aquellas en las que estando acompañados necesitemos aislarnos.

A pesar de todo eso, de las múltiples sensaciones o emociones que vivimos, siempre hay alguien capaz de hacer de un momento más un momento muy especial y lo hace de la manera más sencilla, en el momento menos esperado te llega un sms, un mail, un comentario, lo que sea, diciéndote lo importante que eres para esa persona, lo presente que estás en su vida y que te quiere....

Pocas cosas sientan mejor al alma. La vida, sólo por momentos así, vale la pena.

Gracias MC. Te quiero.

Ana



Mi Pequeño Gran Hombre

Hoy es el cumpleaños de una de las personas que más quiero en este mundo, él me enseñó a descubrir el amor con letras mayúsculas, me mostró cómo efectivamente el vínculo emocional es verdadero aunque la comunicación no sea de igual a igual, él me dejó ver desde su nacimiento lo que era luchar y aferrarse a la vida, él me hizo por primera vez tía, él me hizo reír y rió conmigo, aún lo hacemos, él es un trocito de mí misma y se podría llevar el resto que queda de mí si lo deseara, pues se lo daría todo, él es mi sobrino, una de las mejores cosas que me han pasado en esta vida...

Hoy celebra su 13 cumpleaños, ha vivido ya muchas cosas para su corta edad, ha pasado mucho desde su minuto 1 de vida y eso quizá le ha convertido en una persona fuerte, madura, alegre, social, extrovertido, competitivo, luchador... él no se rinde ante nadie ni ante nada y siempre lo hace con la mejor cara, él siempre encuentra salida y si no la encuentra, la inventa, pero no se estanca emocionalmente, es sincero, natural, ocurrente, despierto, un poco teatrero y muy vivo, sabe enfrentarse al mundo y dice las cosas como son.

Cuando charlo con él y me cuenta sus cosas, sus batallitas, sus amoríos, sus juegos, sus rencillas personales, me siento plena, me gusta escucharle y que confíe en mí, es lo mejor que me puede pasar, siempre quise que así fuera y sólo espero que no cambie esa situación. 

Se hace mayor, y se le nota, pero mantiene su esencia, no ha perdido su capacidad para dar, su generosidad, su cariño y la demostración del mismo. 

Espero que la vida sea justa con él, yo creo que lo será porque se lo está ganando a pulso. Espero que sepa confiar en mí siempre, yo siempre estaré para escucharle y ayudarle o aconsejarle o acompañarle, para lo que necesite. 

Él tiene un gran pedazo de mi corazón, él tiene parte de mi mejor yo y por supuesto, todas mis sonrisas.

Te quiero vida, nunca lo olvides.

Ana

13/10/2013