¡Feliz 2014!

¡Hola de nuevo! Un año más aprovecho estos días para desearos lo mejor para el próximo que comienza.

Como otras veces os he comentado nunca sé muy bien cómo será mi felicitación ni estoy segura de si la habrá, de hecho este año, al igual que me pasó alguno anterior, no había fluido hasta este momento plasmar en letras aquello que mi cabeza mascullaba cada día desde hace unas semanas. Así es como funciona ella, en los momentos tranquilos, en las situaciones en las que nada le ocupa, comienza a tejer pensamientos, a llamar a los recuerdos de lo acontecido en estos últimos 12 meses, momentos dulces, momentos tensos, momentos simpáticos, emotivos, algunos más duros y otros más bellos, reencuentros y desencuentros, pero momentos todos ellos que me pertenecen, que he vivido, que han dejado algo en mí y que no dejan de forjar mi carácter y personalidad para seguir creciendo y enfrentando nuevos momentos.
2013 no ha sido un mal año, ninguno de los vividos lo ha sido en realidad, los ha habido mejores y los ha habido peores pero todos y cada uno de ellos, han conseguido de mí el ser que soy ahora por lo que no puedo desmerecer ni uno solo de los minutos vividos en cada uno de los años pasados pues de ellos se enriquecerán los venideros. 

Ese es, al fin y al cabo, el reto de vivir, llenarte cada día de experiencias y sentimientos que te ayuden a avanzar hacia adelante, rodearte de personas que cada día te aporten todo aquello que necesitas para sentirte vivo, pues una cosa es estar vivo y otra muy diferente es vivir y sentirlo.

En 2013 fueron muchas las cosas que me quedaron pendientes, algunas tienen que ver con otros y muchas tienen que ver conmigo. Este año ha tenido una parte muy mental, de comprensión, de análisis, de búsqueda, en definitiva, de reflexión. Esto no ha permitido quizá desarrollar otros propósitos en los que sé que he fallado pero espero que este paso por 2013 me permita llevar a cabo en 2014 algo de lo que quedó pendiente.

A pesar de todo lo inacabado, a pesar de que sé, y ruego me disculpen, que he faltado a muchos con mi ausencia durante demasiado tiempo, lo que no ha faltado en 2013, así como en años anteriores, han sido sentimientos y emociones, que son el mejor motor para seguir hacia adelante.

No puedo terminar sin agradeceros a cada uno de vosotros el tiempo invertido en mí, vuestros desvelos en mis cuitas, vuestras palabras de confianza y ánimo, vuestros apoyos sinceros, cada sonrisa, vuestras miradas, vuestra generosidad, cada mano tendida para ayudarme, los besos y los abrazos, incluso aquellos dados desde la distancia, que se sienten en ocasiones como si estuvieran presentes, cada lágrima compartida, algunas de las cuales terminaron en risa, la confianza depositada en mí, cada palabra de cariño, cada gesto, cada like, cada comentario o mensaje y, sobre todo...agradezco que estéis ahí, cada uno a su modo o, lo que es más importante, al mío, que es lo que uno más necesita, que los demás sepan comprender cómo los necesitas es vital, y en mi caso eso habéis sabido respetarlo a pesar de que en ocasiones no estuvierais de acuerdo con la forma, el tiempo y/o el espacio...

Gracias por estar y por ser, os deseo un MUY FELIZ 2014, con la esperanza de que sigamos compartiendo risas, abrazos y sentimientos, es lo único que perdurará en el tiempo.

¡Feliz Año Nuevo!

Ana